JULIO 2017
Music & Inspiration
Me duché con agua fría en el Best Western Motel de Arcadia, justo enfrente de la pista de carreras de coches. Anduve desnudo por la habitación, dejando gotear el agua en la alfombra anaranjada, dudando si conectar o no la TV, mirando, sin descorrer del todo las cortinas, los coches aparcados delante de las habitaciones, cada uno aparcado en el número correspondiente a su habitación. Abrí mi mapa de carreteras Rand McNally, lo extendí sobre la cama y me quedé mirando el estado de Wyoming...
Me fui a la mañana siguiente.
Todas las citas en esta página extraídas de Crónicas de Motel.
Sam Shepard
Me fui a la mañana siguiente.
Todas las citas en esta página extraídas de Crónicas de Motel.
Sam Shepard
La luna brillaba intensamente y todavía se notaba el calor del día. Notaba que el calor que emanaba de la tierra era arrastrado por la brisa nocturna. (…) Apoyé la espalda contra una gran roca plana. La roca había acumulado gran cantidad de calor y su contacto con mi espina dorsal era muy agradable (…) Debí de estar allí, sin moverme de sitio, unas tres o cuatro horas. Mirando. Alguna cosa me clavaba allí...
Él y yo asumimos la personalidad de los dueños de coches de este tipo. Nos desabrochamos la camisa y dejamos que el viento nos golpeara en el pecho. Nos pusimos las gafas ahumadas que encontramos en la guantera. (Tenían la montura roja, con unos brillantes en las esquinas). Adelantamos volando a las mujeres que conducían por la carretera...
Encontró un motel que se anunciaba: "Suave como el Terciopelo. Habitaciones de Lujo". Pensó que se tenía merecido el terciopelo. Lo que más ansiaba era precisamente el tacto del terciopelo. Ese terciopelo podía ser un refugio después de tanta carretera.
Subí las escaleras del apartamento de la Segunda Avenida. El mismo viaje que había hecho habitualmente durante dos años seguidos parecía ahora una dura prueba. Al empujar la barra de seguridad me sentí atravesado por todas las otras veces que había hecho este mismo movimiento. Como si lo recordase el cuerpo. Me noté el pecho en tensión y la boca seca, como si hubiese tomado anfetas, cosa que no había hecho. Las habitaciones parecían abandonadas pero, sin verla, sabía que ella estaba allí. ...
Perdieron la emisora navajo a unos noventa kilómetros al este de Gallup en la Highway 40. Simplemente, desapareció. Los viejos tambores se mezclaron poco a poco con los anuncios de McDonald´s y con Tammy Wynette (...) Llevaban treinta y dos horas viajando por las carreteras, toda la noche desde más arriba de Modesto. Se turnaron al volante para poder dormir a ratos, pero como a ninguno de los dos le entraba el sueño acabaron viajando sentados el uno al lado del otro, cantando viejas canciones de Hank Williams y viendo la salida del sol sobre la carretera...
Tammy Wynette
ambas rodillas en tierra
los codos metidos en la noche
es cierta
esta profunda conexión
es indudablemente cierta
la tierra transmite un mensaje
lo exhala
lo capto al inhalar...
los codos metidos en la noche
es cierta
esta profunda conexión
es indudablemente cierta
la tierra transmite un mensaje
lo exhala
lo capto al inhalar...
Ahí abajo, al fondo mismo de la hondonada
en el bar de rockabilly
Lou-Ann muerde el micro
escupe blues
toda la larga y húmeda noche
en el bar de rockabilly
Lou-Ann muerde el micro
escupe blues
toda la larga y húmeda noche
Me acordé de los Vientos Santana en el Valle. "Los Vientos del Diablo". El tremendo calor de las noches. La fantasía de estar con mi novia. Una espectacular chicana con aquella falda gris de grandes rajas a ambos lados de los muslos. Crucecitas de plata lanzando destellos desde sus orejas. Una Serpiente que maté de un tiro en el cuello. Las codornices haciendo ruido en el huerto. Dos Indias gemelas al otro lado de la calzada, desnudándose junto a la ventana. Eucaliptus de Hoja de Plata. Campos rebosantes de Aves del Paraíso...
3.30 de la madrugada
¿Es un gallo
o una mujer que grita a lo lejos?
¿está negro el cielo
o a punto de ponerse azul oscuro?
¿es una habitación de motel
o la casa de alguien?
3.30 de la madrugada
¿Es un gallo
o una mujer que grita a lo lejos?
¿está negro el cielo
o a punto de ponerse azul oscuro?
¿es una habitación de motel
o la casa de alguien?
Se queda quieto junto a la reventada maleta, contemplando las que fueran sus pertenencias. Aplastadas pastillas de jabón que se llevó del baño de los moteles. Chatas latas de judías. Un magullado mapa de Utah. El recalentado alquitrán negro empapa la blanquísima toalla que se guardaba para el primer baño a fondo de todo un mes.
De un extremo a otro de la carretera, nada se mueve. Ni un solo tallo se agita. Ni siquiera se mueve la solitaria pluma de alondra enganchada en el clavo del poste de la valla...
De un extremo a otro de la carretera, nada se mueve. Ni un solo tallo se agita. Ni siquiera se mueve la solitaria pluma de alondra enganchada en el clavo del poste de la valla...
Frase del mes... Joan Didion
Podría ser una frase de Sam Shepard, pero realmente la frase que me he apropiado como mantra de este mes es de Joan Didion, de su libro "El año del pensamiento mágico". No hay nada que explicar, simplemente lo necesito en este momento como agua de mayo y ¡¡me encanta sentirme identificada con alguien en esta lucha!!
¿Por qué siempre necesitas tener razón?
¿Por qué siempre has de tener la última palabra?
Por una vez en la vida, déjalo correr.
¿Por qué siempre necesitas tener razón?
¿Por qué siempre has de tener la última palabra?
Por una vez en la vida, déjalo correr.